Gohan, Yamcha y Ten, que se los había encontrado mientras iba hacia el
palacio de Kamisama, llegaron al lugar de la batalla diez minutos después.
Encontraron los restos de A-18 rapidamente, pero tardaron bastante en encontrar
los restos de Uub. Estaba junto a una orilla del río, medio helado y
desfigurado. Por ningún lado encontraron a Veil, por lo que se imaginaron que
Uub le venció. Yamcha se agachó para llevárselo.
–
Bien
chico-dijo, despidiéndose de él- al final lo conseguist... ¡Un momento! Tiene
pulso... ¡Está vivo!
–
¿Cómo?-dijo
Ten
Decidieron llevárselo rápidamente al Palacio de Dios para ver si Dende
pudiera curarle. Al llegar, Dende le curó las heridas, pero no pudieron
recuperar su oreja derecha, su brazo derecho, su mano izquierda y sus dos pies.
Uub no despertaba, y aunque lo hiciese, no podría volver a luchar. Al cabo de
un rató llegó Satán junto a una gran botella que contenía a Buu (finalmente se
dió cuenta de que no estaba jugando). Al ver a Uub y a Buu juntos se dieron
cuenta de que Uub debía haber cogido fuerza de su contraparte para poder vencer
a Ginyu. Esa era la razón de que Uub siguiese teniendo gran parte de su cuerpo,
le había cogido materia a su contraparte, de forma que Buu se quedó así y Uub
no desapareció completamente, que es lo que debería haber pasado a cualquier
mortal que utilizase el Kaioken a tanta potencia.
Cinco horas después, todos los guerreros Z se reunieron en el palacio de
Kaiosama. Buu ya empezaba a solidificarse, aunque ahora parecía una gelatina.
Tenían seis bolas de dragón, pero no tenían forma de encontrar la séptima. Ni
siquiera Baba podría decir dónde se encontraba, ya que Ginyu le había destruido
su bola. Y hasta que no pudieran ir a Nuevo Namek o hablar con el Dios Kaito,
no podrían hacer nada. Pero Kaito, sin su planeta al final del camino de la
serpiente, estaba un poquito “inaccesible” por los Guerreros Z.
–
¿Seguro que
no puedes construir una nave más rápidamente?-
le preguntó Trunks a su madre
–
No sin las
piezas. Pero no queda ninguna nave de los saiyans por aquí
–
Un momento...
¡Si que queda otra nave!- dijo Puar, al encontrar la solución. - la nave de
Freezer. Trunks la destruyó, pero sus piezas deberán seguir por la zona.
–
¡Tienes
razón!-dijo Bulma- ¡tenemos que ir ahí enseguida!
–
Te
acompaño-dijo Bra. Desde pequeña le había encantado el trabajo de su madre,
incluso había empezado a estudiar nanotecnología capsulativa – y Trunks, tu
también deberías venir, ya que por tu culpa la nave estará medio-destruida .
–
Pepepepero...-dijo
Trunks. Iba a quejarse, pero Bra le miró con una mirada asesina y Trunks
decidió callarse.
–
Nosotros nos
vamos a casa.-dijo Ten Shin-hasta luego
Todos los Guerreros se fueron tranquilos a casa. Se pensaban que la
tormenta ya había terminado. No podían estar más errados. Ahora mismo sólo
estaban en el ojo del huracán. Y la otra parte del huracán era mucho más
terrible.
por que no lo adaptas al manga
ResponderEliminarOye disculpa, ¿Cada cuanto publicas tu trabajo?
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